Hazte fuerte aunque seas débil, si no quieres que se note, lloras sola y en silencio, hasta que tu paciencia explote, y ya no puedas, y es que las penas no se olvidan, solo te acostumbras a ellas, no se cierran las heridas...
lunes, 23 de noviembre de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario